La causa Kellü del mes de agosto fue recaudar el dinero para la compra de un asistente de tos para Joaquín. En entrevista con Mónica Romero, su madre, nos enteramos de lo que este proceso significó para la familia y el impacto que la compra de esta máquina tendrá sobre la vida de su hijo.
“¡Lo logramos!” Fue lo primero que dijo Mónica Romero cuando se cumplió la meta de la campaña de Kellü del mes de agosto, la cual consistía en recaudar $6.000.000 para comprar algo que su hijo Joaquín necesitaba con urgencia: un asistente de tos.
Joaquín tiene 4 años y vive en Parral. Sufre de atrofia muscular espinal tipo 1. La atrofia muscular espinal o AME es una enfermedad que daña o mata las neuronas motoras, es decir las células nerviosas que controlan el movimiento de los brazos, piernas, cara, pecho, garganta y lengua. Mónica explicó que llegaron a Kellü a través de otros padres con la expectativa de recibir la ayuda que necesitaban.
“Para nosotros se veía muy lejano tener un asistente de tos porque es mucho dinero, nosotros sabemos como papás de un niño con discapacidad que todos los insumos son carísimos”, nos contó Mónica.
El proceso para los padres de Joaquín implicó nervios e incluso miedo de no poder lograr el objetivo, pero también una felicidad muy grande al ver la meta alcanzada y saber que un recurso que requerían para mejorar la vida de Joaquín y ayudarlo a respirar mejor, podría finalmente ser adquirido. ||
”Nosotros como familia ya estamos acostumbrados a pedir dinero para el Joaco, pero esta suma era muy grande, por eso acudimos a la Fundación Kellü. En un principio estábamos asustados, porque como a mediados de mes no se había juntado tanto, pero cuando finalmente lo logramos, estábamos saltando acá en la casa, gritamos de felicidad”, agregó entusiasmada Mónica.
Además explicó que sin el asistente de tos recurrían a la kinesioterapia para ayudar a respirar a Joaquín, lo que implicaba apretar constantemente sus pulmones, por lo que la ayuda tendrá un significativo impacto en su vida diaria y le permitirá realizar un acto que a cualquiera le puede parecer sencillo pero que para Joaquín implicaba un desafío: respirar bien.
“Como papás quisiéramos darle todo, ojalá tuviéramos muchos recursos, pero lamentablemente somos Fonasa, entonces le damos todo lo que podemos dentro de lo que a nosotros nos alcanza”, manifestó mostrándose no sólo agradecida sino también generosa y con la determinación de hacer lo posible para ayudar difundiendo otras causas.
“Yo vivo esto todos los días, por lo que si puedo aportar un granito de arena para otras familias, se tiene que hacer”, concluyó.
La causa de Joaquín es una de las muchas causas que Kellü apoya mes a mes. ¡Acompáñanos a conocer la causa de este mes y a seguir ayudando a cambiar vidas!